¡GRAN ESTRENO!
El 8 de marzo de 1933, Federico García Lorca estrenó Bodas de sangre en el Teatro Beatriz de Madrid, cuyo éxito fue aclamado por las crónicas de su tiempo. Hoy, esta obra se considera una de las obras cumbres de la tradición dramática española.
El reconocimiento de esta obra viajó más allá de nuestras fronteras. El 13 de octubre de ese mismo año, el poeta y dramaturgo granadino desembarca en Buenos Aires. Allí, Lola Membrives, dueña de una compañía teatral que lleva su nombre, estrena de nuevo Bodas de sangre en el gran Teatro Avenida. Federico se convirtió en un personaje literario de gran consideración pues, una vez más, su obra consiguió eclipsar al público.
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Este drama rural siguió viajando por el continente americano. En febrero de 1935, al tiempo que Lola Membrives representaba Bodas de sangre en el Coliseum de Madrid, la obra se estrenaba en el Neighborhood Playhouse de Nueva York dirigida por Irene Lewishon bajo el título Bitter oleander ("Adelfa amarga").
Esta obra ha sido objeto de incontables adaptaciones y ha conseguido la interpretación de importantes actrices, de la talla de Margarita Xirgú. Junto a ella, Federico interpretó la nana del caballo al piano en el Principal Palacio de Barcelona, lugar que albergó otra importante puesta en escena de la obra.
Basada en hechos reales
García Lorca, ferviente lector, hojeaba el periódico ABC en la Residencia de Estudiantes un día de julio de 1928. Su atención la llama especialmente un noticia que refiere un crimen en el Cortijo del Fraile, en Níjar (Almería). Lee atentamente la historia, a la que el periódico el Heraldo de Madrid le dedica una noticia tras otra durante una semana. Sin embargo, lo que despierta su curiosidad es la lectura de Puñal de de claveles de Carmen de Burgos, Colombine, publicada en 1931.